SUEÑOS

Por las calles oscuras
viajan lunas solitarias
y los balcones
reflejan el vuelo de una guitarra

Se escucha el crujir de las miradas
el aleteo invisible de los sueños
el azul cobalto de los coches
y
mientras tanto
cada hora
te recuerdo,
porque así formas parte de mi noche
(como mis ojos
forman parte de tus ojos
cuando me miras)

Y tiendo una alambrada de deseo entre tu cuerpo y el mío
y el hilo invisible de tu rechazo
me transporta más allá de la frontera de mis fantasías
donde vuelvo a transformarme en aquel niño
que enfundaba su mano en el bolsillo
que disparaba piedras a la vida.